Conforme fueron pasando las horas, por la actitud que transmitieron los protagonistas por distintos medios, tanto Federico Valverde como Alex Baena confirmaron el cruce que protagonizaron después del partido que el Villarreal le ganó 3 a 2 al Real Madrid en el Estadio Santiago Bernabéu el sábado por la noche, por la jornada 28 de LaLiga.

Por lo que de a poco diferentes figuras del mundo del fútbol se animan a opinar de lo que, en definitiva, fue un intercambio de golpes como producto de una presunta desafortunada frase (en teoría, según Marca, Baena habría dicho ''llora ahora que tu hijo no va a nacer'') que el mediocampista del Submarino Amarillo le habría lanzado al uruguayo el 19 de enero pasado cuando ambas parcialidades se enfrentaron por los Octavos de Final de la Copa del Rey.

 

Entre quienes compartieron su postura, se encuentra Gustavo Poyet, compatriota de Federico Valverde, que en una entrevista con AS justificó la reacción del futbolista del Real Madrid: “Si lo miro desde el lado de Valverde, hubiera hecho lo mismo. No tengo ninguna duda de que haya podido pasar. Si pasó otra cosa, ya veremos si va algún lado, si hay investigación... Analizándolo desde lo que Fede dice que le dijo, creo que se quedó corto. Después, cada uno hace lo que quiera. Hay límites en hablar”.

 

La imagen que anticipó el altercado entre Federico Valverde y Alex Baena post partido. 
    Captura de transmisión oficial.

La imagen que anticipó el altercado entre Federico Valverde y Alex Baena post partido. Captura de transmisión oficial.

Además, el entrenador de la Selección de Grecia dejó en claro que se inclina por creerle a su coterráneo: ''Del otro lado dirán que no le dijo nada y que Valverde le pegó una trompada porque se le pasó por la cabeza. Si fuera un jugador conflictivo, podemos pensarlo. Si nunca hizo nada, que yo recuerde... Creo que lo peor que se recuerda de Valverde es en aquel ‘foul’ contra el Atlético de Madrid que era el último hombre y bajó a Morata para que no hiciera gol. Eso es lo peor. Una acción de fútbol de bajar a uno para que no meta gol. Que de un día para otro, posiblemente, le pegue una trompada sin nada de por medio suena medio raro”.

Para cerrar, Gustavo Poyet, siempre en la misma entrevista, reflexionó: “Habrá que esperar. No sé en que quedará. Espero que no quede en nada. Son cosas que pasan en el fútbol que por una razón algunos se las llevan mejor que otros”.