La fase de eliminación directa de la Copa Sudamericana se puso en marcha esta semana con los duelos de ida de los 16avos de final. Los equipos que salieron terceros en la Libertadores se sumaron a la segunda competencia de clubes en importancia de Conmebol.

En el Estadio Atanasio Girardot, Independiente de Medellín, uno de los eliminados de la Libertadores, recibió a San Lorenzo. Los colombianos buscaban un resultado favorable como local para acercarse a los octavos de final, con São Paulo esperando al ganador en esa instancia.

El elenco combinado por Alfredo Arias salió a forzar la primera diferencia a su favor a través de la posesión de la pelota. Pero, a pesar de dominar de aquella manera, recibieron una mala noticia en el promedio de la primera parte al quedarse con un jugador menos.

Es que, sobre la banda, Edwin Cetré intentó disputarle una pelota a Malcom Braida, pero su cálculo falló por mucho. El volante colombiano impactó sobre la tibia del jugador del Ciclón y estuvo al borde de la fractura. El árbitro Alexis Herrera mostró inicialmente una tarjeta amarilla, pero la revisó en el VAR y corrigió hacia la expulsión.