Por el partido de vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores, Bolívar se impuso por 5-4 en los penales ante Athletico Paranaense. El combinado brasileño supo ganar por 2-0 en los 90 minutos, pero Thiago Heleno falló el penal decisivo con un potente remate al travesaño.
En la altura de La Paz, el combinado boliviano había conseguido una sorpresiva ventaja en el partido que abrió la serie. El doblete de Ronnie Fernández y el tanto restante de Diego Bejarano, con descuento de por medio de Erick, los de Beñat San José viajaron a Brasil en ventaja.
En 31 minutos de la primera parte, el último subcampeón de la Libertadores descontó en los pies de Fernandinho, que aprovechó un penal. Fue sobre el cierre de la primera mitad cuando apareció la gran polémica de la noche: por el VAR, Kevin Ortega sancionó una discutida falta en ataque que perjudicó a Bolívar.
Patricio Rodríguez había anotado el empate en el duelo de vuelta, recuperando la ventaja de dos goles en el global. Sin embargo, el árbitro cobró un empujón de Fernández a Thiago Heleno, que aún genera grandes críticas. Vitor Roque, a los 22 del complemento, puso el 2-0 que llevó el trámite a los penales.
En la definición no hubo fallos hasta la décima ejecución. Thiago Heleno arriesgó con un fuerte remate que impactó en el travesaño. Así, Bolívar jugará los cuartos de final de la Copa Libertadores. Su rival será otro brasileño: Internacional de Porto Alegre, que venció por penales a River Plate.
