Mientras Marcelo Bielsa es presentado como el nuevo entrenador de la Selección Uruguaya y explica que aún no ha tomado la decisión sobre si contará con los referentes de la Celeste en adelante, Luis Suárez continúa afrontando su carrera a nivel clubes, con un importante compromiso este domingo.

El Pistolero tuvo uno de sus partidos más importantes desde que llegó a Gremio en el marco de la Copa de Brasil. Ante Cruzeiro, con un boleto para los cuartos de final en juego, el combinado gaúcho saltaba a la cancha tras haber eliminado al ABC de Natal en la última instancia.

En el partido ante el club cuyo propietario es Ronaldo Nazário, Bruno Rodrigues abrió la cuenta en apenas 8 minutos para el combinado belo-horizontino. El delantero la tomó lejos del área y la clavó en el ángulo más lejano para firmar un verdadero golazo en el arranque del choque.

Tras el festejo del jugador brasileño, Luis Suárez casi continúa por la misma vía al intentar una acción que lo hubiese dejado como candidato al Puskas de haberla concretado. El charrúa controló en el área e intentó darle de chilena y de media vuelta por arriba del arquero, pero su remate impactó contra el travesaño, dejando al uruguayo con las ganas de gritar lo que hubiese sido el empate.

Sin embargo, el goleador uruguayo tuvo revancha en el complemento y consiguió balancear el trámite con una anotación impresionante. El atacante sacó a relucir su talento al disparar de larga distancia y de tres dedos, clavándola sobre el ángulo del primer palo para firmar, ahora sí, un verdadero golazo.